Tendencia a la Clausura del Debate Epistemológico - Alberto R. Vilanova

"Tal como fuera señalado recientemente (Klappenbach, 1985), el problema epistemológico de la psicología es, ante todo, una cuestión escolástica, es decir, una discusión entre escuelas que no han logrado establecer un acuerdo básico sobre el objeto, el método, las condiciones de verificación, etcétera. Se ha dicho, incluso, que la Psicología es un campo de paradigmas inconmensurables, esto es, de concepciones de la ciencia y del hombre imposibles de cotejar. Este estado de la Psicología, no obstante, no es distinto al del resto de las ciencias, en cuyo seno surgen, incesantemente, múltiples explicitaciones para similares fenómenos. La existencia de teorías alternativas debe ser aceptada como inherente a toda empresa de conocimiento y debe preocupar profundamente la negación de ete aspecto en favor de alguna verdad presunta y a priori. El debate teórico en Psicología está abierto a escala mundial, y pretender suprimirlo en aras de alguna preferencia personal o grupal es adoptar una actitud de pisabrotes, extraña a la ciencia. Pese a ello, la vida universitaria argentina ha sufrido umerosas cancelaciones del debate, basadas en la anulación de gruesas parcelas de la realidad. El "literateo", la apelación a textos "interpretables", reemplazaron a los diseños investigativos. EN las clases, especulativas y centradas en la rebusca de "esencias" en los vocablos, se evitaban -diríamos a conciencia- las noticias del mundo, los descubrimientos y los "asunyos mayores" de la psicología en cuanto tal. Lejos de proponerse la búsqueda de la mudadiza verdad como objetivo se supuso que obraba ya en poder de algunos, y se desconoció el paciente camino de la investigación como recurso último. Paradójicamente, a nivel mundial, se adminte que el conocimiento prosigue sin pedir permiso a las "escuelas o sistemas", a la par que se reconoce el valor de insistir más en los hallazgos básicos de los sistemas que en sus diferencias.

Una conclusión que se impone es la de que el psicólogo que se forme estará comprometido en la búsqueda de certidumbres fácticas más allá de las coyunturales propuestas de las "escuelas". La formación de una mentalidad "divergente", crítica -pero no selectiva- en el estudiantado es el camino a tomar, y para ello es necesario no escamotear curricularmente la existencia de múltiples abordajes conceptuales para tópicos del mismo orden."

VILANOVA, R. A. (2003) La psicología como ciencia y profesión- En Discusión por la Psicología. Universidad Nacional de Mar del Plata, Argentina.