sábado, 28 de mayo de 2011

"¿Por qué hay ser y no más bien nada?" Posibles respuestas


"¿Por qué hay ser y no más bien nada?" Una pregunta con una respuesta imposible. Difícil pregunta ante la cual no hay posible salida sin caer en "salvadores cognitivos", en constructores teóricos, teológicos o de orden filosóficos. Ante esta pregunta (y muchas otras de carácter existencial) tenemos dos opciones vivenciales de respuesta:
  • provisoriamente llamados "salvadores cognitivos" que, desde una lógica externa a la pregunta que nos permitan darle respuesta de forma inconclusa.
  • O decidimos no responderla viviendo como si nunca hubiera llegado a nuestros oídos.

Usted puede llegar a reflexionar sobre esta segunda postura que acabo de expresar y decir "Claro, hoy por hoy, el hombre, inmerso en su vorágine de mercado y de la moda, deja pasar sus días sin responderse estas preguntas o sin siquiera pronunciarlas; y en el caso de que algún agente externo pudiera llegar a planteárselas resbalan ante ellos como si se tratara de aquel deporte que a él no le interesa o aquella guerra que se está librando a miles de kilómetros de su ciudad y sus intereses". Aún cuando haya verdad en esta afirmación, creo que parte de un presupuesto falso, de una falacia en la que muchos caemos "Los tiempos anteriores siempre fueron mejores". Yo creo que "antaño" estas preguntas importaban tanto o menos al hombre común que ahora. Según mi forma de ver las cosas, "hoy por hoy" el hombre tiene acceso a estas preguntas más que nunca por la famosa "democratización de la información" pero aún así no se logra poder detener para reflexionar e intentar responderla. Es como si un martillazo existencial cayera sobre su cabeza y aún así siguiera caminando sin percatarse de este hecho ni mucho menos tomar acciones en función de salvar tamaño golpe.

En conclusión, ante semejantes preguntas el hombre tiene dos posibles salidas: el dogmatismo o la ignorancia.
¡Que garrón!

¿A alguien se le ocurre otra salida?


Franco Morales

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Una pregunta con una respuesta imposible.

Anónimo dijo...

un consejo ya que los seguís, me gusta lo que escribís pero prefiero las notas tiernas cargadas de sentimientos , inteligente ya se que sos lo que sabia era que eras tan dulce

Anónimo dijo...

un consejo ya que los seguís, me gusta lo que escribís pero prefiero las notas tiernas cargadas de sentimientos , inteligente ya se que sos lo que no sabia era que eras tan dulce

Catriel Fierro dijo...

en esta posmodernidad, a mayor información, mayor desinformación.

me es inevitable desviarme hacia la "síntesis" y decir que quizá la respuesta es la superación de la pregunta. O por ahí un enfoque más pragmático... Tal vez no considerar el dogmatismo o la ignorancia como respuestas o salidas. Porque, fijate vos, que ya valoramos las dos "salidas" de cierta manera, y de algun modo es violentar la voluntad del dogmático/ignorante obligándolo a movilizarse. Quizá estamos condenados a vivir con la náusea sartriana constante, pero si el dogmático y el ignorante hallan cierto sentido a la existencia, tal vez seria mejor dejarlos.
Pero con lo que coincido totalmente es que esta duda es propia de esta época. Tenemos tiempo para plantearnos qué hacemos... quizá demasiado tiempo.

califico para salvador cognitivo, creo.

Anónimo dijo...

Para muchas personas es muy duro asumir la necesidad y existencia de estos dilemas. Hay tantos que no tienen disposición, o valor, o una formación para atreverse a enfrentarlas y llegar más lejos: si no encontrarles una respuesta cabal, al menos vislumbrar esperanza. Por eso agradezco profundamente lo que se me ha dado!!

Franco Morales dijo...

Sin eso "que se nos ha dado", estariamos en pampa y la vía...
Creo que el hecho de marcar este dilema y esta dificultad para resolver el problema rompe con la idea de que un pensamiento sin presupuestos es posible...

JusT Vi! dijo...

Desde mi ignorante posición, sin postura definida, y pese a la dificultad de definir ''nada'', creo que si hubiese más bien ''nada'' y no ''ser'', la pregunta no tendría sentido. Es decir, el mismo hecho de poder plantear la pregunta demuestra que no hay ''nada'', sino ''algo'', aunque sea simple curiosidad o, si se quiere también, ignorancia, que elimina la ''nada''. Luego, hay ''ser'', supongo jaja

Anónimo dijo...

muy interesante el comentario en favor del pragmatismo. LT.

Anónimo dijo...

Hay que dejar claro primeramente que tal respuesta sólo puede ser dada desde una argumentación ontológica en donde se defina de forma lógica qué es y por qué es lo real. No obstante tales argumentaciones han resultado siempre inasibles al intelecto humano que parece incapaz de encontrar una explicación no contingente sobre lo que es real.