miércoles, 9 de diciembre de 2009

Lonely Minotaur


Asterión el Minotauro (Μινόταυρος), era un monstruo con cuerpo de hombre y cabeza de toro. Fue encerrado en un laberinto diseñado por el artífice Dédalo, hecho expresamente para retenerlo,ubicado probablemente en la ciudad de Cnosos. El minotauro fue hijo de una unión contra natura.Sólo comía carne humana, y conforme crecía se volvía más salvaje. Cuando la criatura se hizo incontrolable, Minos ordenó a Dédalo construir una jaula gigantesca de la cual el Minotauro no pudiera escapar. Dédalo entonces construyó el laberinto, una estructura gigantesca compuesta por cantidades incontables de pasillos que iban en distintas direcciones, entrecruzándose entre ellos, de los cuales sólo uno conducía al centro de la estructura, donde el Minotauro fue abandonado.

domingo, 6 de diciembre de 2009

Estas vacaciones tan inservibles, estas píldoras blancas que no son de mi tipo. Muchos pensamientos han dado vuelta por mi cabeza en estas 13 horas que llevo manejando.
Hoy tengo por perdido el rugoso concreto donde nos sentabamos pasadas las 8 o 9 de la noche, donde lentamente parabamos de reir por el brillo de nuestras almas.
Le he dado muchas vueltas en mi cabeza a las noches que compartíamos. Los días iban y venían, nuestra vida pasó demasiado deprisa. Cada tanto, en el suelo de tu habitación recordaba respirar. Ahí mismo yo me recosté y te dije "te amo", pero vos juraste que me querías más.
¿Te importa si yo no sé que decirte?
¿Vas a dormir esta noche o a pensar en mí?
¿Te importa si me expongo desnudandome ante tí y pretendo que está todo ok?

sábado, 5 de diciembre de 2009

Welcome my son, welcome to the machine

Cuando nos arrojan del útero somos una gran potencialidad. Potencialidad positiva o potencialidad peligrosa. Podemos ser quienes cumplan las expectativas de quienes nos pensaron o mostrarnos más tarde rompiendo con dicha expectativa. Quienes nos pensaron pueden ser nuestros padres, familiares, o tal vez también la sociedad misma, que nos asignó un lugar en su cuna desde antes de nacer.
En el fondo de la cuestión esta la realidad de que la posición que tomemos siempre será relativa. Relativa a esa expectativa. Esa expectativa nos determina, o al menos nos condiciona. Nos marca un camino que seguir; o al menos, un camino con el que romper.
Siguiéndolo, somos ovejas de rebaño. Somos espejo de un tercero. No somos nosotros mismos.
Rompiendo con ella por el hecho de cortar con la expectativa... nos hace ser la oveja descarriada, que por mayor libertad que tenga, siempre sabrá que la libertad será libertad DE... Libertad de no estar con su rebaño...

La cuestión está en que tanto siguiendo el modelo previsto, como rompiendo con él y siendo libre con respecto al mismo, en el fondo seguimos estando atados a él.

La gran pregunta que se me presenta ahora es ¿Habrá una posición superadora? Allí es donde recordando a Zaratustra encuentro un esbozo de respuesta...

Así hablo Zaratustra: ¿Libre te llamas a ti mismo? Quiero oír tu pensamiento (…) ¿Eres tú alguien al que le sea lícito escapar de un yugo? (…) ¿Libre de qué? ¡Qué importa eso a Zaratustra! Tus ojos deben anunciarme con claridad: ¿libre para qué? ¿Puedes prescribirte a ti mismo tu bien y tu mal y suspender tu voluntad por encima de ti como una ley? ¿Puedes ser juez para ti mismo y vengador de tu ley?”


Tal vez teniendo un para qué ser libres, podamos separarnos de esa expectativa y crear la propia